El primer versículo ubica a Sofonías en la familia real. Es descendiente de Ezequías (Isaías 36-39). Su nombre significa “Dios esconde” o “Dios oculta”. Profetizó entre 637 y 609 a. C durante el reinado de Josías. Fue contemporáneo de Jeremías y su ministerio antecedió la conquista babilónica (627-585 a. C.). Los eventos del juicio inminente fueron profetizados por Isaías (39).

Sofonías, como los otros profetas, está escrito bajo las convenciones de la poesía hebrea, la cual usa el paralelismo sinónimo, el antónimo y quiasmos.

¿Por qué está Dios tan enojado con el pecado y los que lo practican? ¿Qué pasaría si Dios no se enojara por el pecado? Imagínate este mundo sin el juicio y control de Dios. Este pequeño libro muestra que Dios es activo en la vida diaria de todos.

Juicio contra Judá (1:2-13)

Empieza con una advertencia sobre la destrucción por venir. El pueblo de Judá al igual que sus hermanos en Samaria habían abandonado al Señor. Ellos habían mezclado sus creencias profundas con los dioses de su tiempo. Estaban combinando su lealtad a Dios con las cosas de este mundo.

El juicio del Señor resulta en la destrucción de los que se oponen a Él. Ellos serán exterminados y castigados. También tenemos aquí una lista de cosas que hacen que el Señor se enoje (1:4-12): adoración a Baal, idolatría, jurar ante el Señor y ante Milcom, los que han dejado de seguir al Señor, vestirse con ropas extranjeras, los que llenan la casa del Señor con violencia y engaño, los que pesan la plata falsamente.

El gran día del Señor (1:14-18)

El “día del Señor” tiene dos aspectos: juicio y salvación. Está descrito como un día de juicio y destrucción; como el día de la ira (1:18). En la última parte, “el día del Señor” es un día de salvación cuando reunirá a su pueblo (3:8-20) y explica la esperanza que tenemos en el Señor.

Sofonías llama al arrepentimiento (2:1-3)

Hay una esperanza para salvación. Les dijo al pueblo: congréguense y clamen al Señor. La salvación no está en el orgullo, no está en los ídolos, sino en volver al Señor. Los llama a reconocer sus fallas, a humillarse.

“Congréguense, congréguense, oh nación sin pudor, antes que entre en vigencia el decreto (como tamo pasa el día), antes que venga sobre ustedes la ira del Señor, antes que venga sobre ustedes el día del Señor. Busquen al Señor, todos ustedes, humildes de la tierra que han cumplido Sus preceptos; busquen la justicia, busquen la humildad. Quizá serán protegidos el día de la ira del Señor”, (Sofonías 2:1-3).

Es interesante que Sofonías ve que la única esperanza ante la ira del Señor es que le busquemos.

Juicios a las naciones (2:4-15)

Esta sección muestra que todos están bajo el juicio de Dios. Cuando él venga en su ira, no habrá escape. Todos serán juzgados. Algunos pudieron haber pensado que si huían a una de las naciones vecinas podrían escapar de la la ira de Dios, pero no es posibe.

2:1-7 Juicio contra los Filisteos (Occidente)

2:8-11 Juicio contra Moab y Amón (Oriente)

2:12 Juicio contra Cus (Sur)

2:13-15 Juicio contra Siria (Norte)

El juicio viene sobre ellos por su orgullo, por atacar al pueblo del Señor, por aprovechar la derrota del pueblo del Señor y por la corrupción.

Al final de la sección del juicio a las naciones se vuelve a hablar de Jerusalén. Acusa a los príncipes, sacerdotes y profetas de ser desleales al Señor. Como consecuencia el Señor les va a juzgar. Pero hay esperanza:

“Dije: ‘Ciertamente me temerás, aceptarás la corrección. Entonces no será destruida su morada a pesar de todo lo que Yo había determinado sobre ella; pero ellos se apresuraron a corromper todas las naciones”, (Sofonías 3:7).

Otro nota de esperanza es que el Señor va a dar a los pueblos salvación.

“En ese tiempo daré a los pueblos labios puros, para que todos ellos invoquen el nombre del Señor, para que le sirvan de común acuerdo. Desde más allá de los ríos de Etiopía mis adoradores, mis dispersos traerán mi ofrenda. Aquel día no te avergonzarás de ninguna de tus acciones con que te rebelaste contra Mí. Porque entonces Yo quitaré de en medio de ti a los que se regocijan en tu orgullo, y nunca más te envanecerás en mi Santo Monte. Y dejaré en medio de ti un pueblo humilde y pobre, que se refugiará en el nombre del Señor. El remanente de Israel no hará injusticia ni dirá mentira, ni se hallará en su boca lengua engañosa, porque ellos se alimentarán y reposarán sin que nadie los atemorice”, (Sofonías 3:9-13).

Esperanza sólo en el Señor (3:14-20)

Después de escribir un libro lleno de desastres y juicios, Sofonías termina escribiendo de reconciliación, perdón y júbilo para el pueblo de Dios.

En la última sección de Sofonías describe un tiempo en que Judá debe regocijarse porque el Señor retira todos los juicios a su pueblo y aleja a todos sus enemigos. El Señor mismo estará en medio de su pueblo. Él está gozoso y cantando con júbilo. La victoria se ha alcanzado.

“El Señor tu Dios está en medio de ti Guerrero victorioso, Se gozará en ti con alegría, en su amor guardará silencio, Se regocijará por ti con cantos de júbilo”, (Sofonías 3:17).

Sofonías se presenta al Señor gozoso por la salvación de su pueblo. Los cautivos serán liberados. El pueblo estará congregado y su rebaño unido.

Escatología bíblica

Toda la Biblia presenta dos edades: la edad presente que termina en juicio y la edad mesiánica que inicia con Jesús. Entonces, Sofonías habla del juicio que va a terminar con Judá y las naciones y acerca de la salvación que el Señor va a dar a los que creen en él. Este sistema también se usa en el Nuevo Testamento en Hebreos 1:1-4 donde habla de los tiempos pasados en que Dios habló por medio de los profetas y estos últimos tiempos cuando nos habla por su Hijo. Los últimos tiempos en el Nuevo Testamento siempre hablan del tiempo presente. Esto se ve en Hechos 2:17 donde cita a Joel 2:28-32 aplicando el pasaje al tiempo presente. También en 2 Timoteo 3:1 Pablo está advirtiendo a Timoteo de los problemas que habrá en la iglesia y dice¨: “También debes saber esto: que en los postreros días vendrán tiempos peligrosos…”.


Índice A.T.